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Casi parece increíble, pero Kodak tiene activos por vender, y Brother se acaba de adjudicar uno de sus departamentos más conocidos. La firma estadounidense ha alcanzado un acuerdo inicial con sus antiguos rivales japoneses para desprenderse de su división Document Imaging, encargada de desarrollar máquinas de digitalización de documentos. Escáneres, para que nos entendamos. El precio de la operación será de 210 millones de dólares.
Asumiendo que no aparezca un apuesto príncipe azul en el último momento con una oferta más interesante, Brother se hará con el control del hardware y el software de escaneo de Kodak para el mes de junio, que es cuando los tribunales se pronunciarán sobre el asunto. El veredicto se espera que sea favorable, dado que la corte encargada de supervisar la bancarrota de Kodak está precisamente interesada en obtener dinero con el que resarcir las deudas contraídas durante los últimos años y poder limpiar sus cuentas antes de relanzar la empresa.
Todo parece indicar que una vez lejos de las fauces de los leones, Kodak sobrevivirá prácticamente como si fuera un fondo de patentes, licenciando a otras compañías un colosal archivo de propiedad intelectual acumulado durante décadas, e incluso cendiendo su nombre a otras empresas para comercializar cámaras digitales.Read | Permalink | Email this | Comments